Este relato cierra la serie de Nika y Konstantin, son cuatro relatos, y los he subido todos de golpe porque así es como los subió Nika en su día, en apenas 10 minutos colgó los cuatro para que quien quisiera pudiera seguir la historia sin cortes.
Konstantin & Nika’s Epilogue
El soldado de Deber se acerca a los escombros, algo brillante le llama la atención. La última palabra en su mente es “joder!” y una bala calibre 50 se introduce en su cavidad ocular derecha, atravesando por su cráneo, arrastrando gran parte de su cerebro.
La Desert Eagle suelta un fino hilo de humo desde su caño, mientras Konstantin se quita los trozos de cemento de encima. Su brazo izquierdo esta fracturado en tres partes, con el cubito expuesto. La sangre cae de su cabeza tiñendo su vista de rojo.
Se arrodilla sobre los escombros inspeccionando su brazo, se pone de pie y piensa “al menso puedo caminar”. El QBZ 95 quedo enterrado, mira su fiel pistola, nunca le ha fallado, incluso ha vuelto a él después de perderla y comienza a caminar.
Entra a Rostok, no puede correr a causa de su brazo. Avanza derecho caminando, hasta que ve un enrome contenedor metálico abierto. Se pregunta qué demonios será eso pero no tiene tiempo, su objetivo es el Bar.
Nika comienza a subir por la escalera. Irina sube detrás, solo alcanza unos cinco metros y la escalera colapas a sus pies. Nika estira su mano hacia abajo justo para tomar a Irina, ella queda colgando, Nika no es tan fuerte, pero la adrenalina corriendo en su corriendo por su cuerpo le permite elevar a Irina hasta que ambas mujeres quedan paradas sobre el mismo escalón. Se miran a los ojos y en ese momento tres disparos impactan en la espada de la rusa. Nika se quita la máscara, grita y la sostiene, Irina también se quita la máscara y comienza a toser, sus ojos están fijos mirándose. Los de Nika comienzan a llenarse de lágrimas a ver que los de Irina comienzan a apagarse. La mano de la rusa se suelta de la escalera y sus piernas se aflojan.
- No, por favor, aguanta, vamos a lograrlo -. Dice Nika entre sollozos
- no, no puedo -. Dice Irina.- tienes que subir y escapar.
- pero no se pilotear -. Contesta Nika como si eso fuera todo.
- yo tampoco -. Dice Irina y suelta una sonrisa.
- por favor…yo …- Nika usa todas sus fuerzas para elevar el cuerpo de Irina hacia ella.
Más disparos dan contra la pared.
- déjame y sube, van a matarnos a las dos, puedes escapar, no mereces morir en este lugar, eres lo único que no ha sido corrompido por la Zona. Quizás el piloto aun está ahí, esperando -. En ese momento Irina recibe otro disparo.
- NOOOO!-. Grita Nika rompiéndose las cuerdas vocales. Ya no puede sostenerla más, sus brazos comienzan a temblar. La acerca aun más hacia ella y la besa en la boca, en ese momento la chaqueta de Irina se desgarra, arrancando también las uñas de los dedos de Nika. La rusa cae hacia el suelo mientras mas zombies disparan contra Nika. Ella comienza a subir por las escaleras.
Konstantin entra a un edificio, oye disparos a lo lejos, apura sus paso en la oscuridad, de pronto golpea con algo metálico, el objeto rueda por el piso lanzando pequeños destellos. Algo le resulta extrañamente conocido. Se agacha hacia el objeto y el horror se apodera de él. Es la máscara de Hoffman y tiene varios impactos de bala. Comienza a mirar frenéticamente hacia todos lados pero no ve su cuerpo por ningún lado. Rápidamente sale del edifico y continua su camino hacia el bar.
El helicóptero descansa en el medio del techo, sin nadie a su alrededor, el piloto esta dentro apoyado contra el respaldo como si la estuviera pasando genial, pero Nika pronto ve que sus manos cuelgan a sus costados y tiene un enorme hoyo en su cabeza. La pequeña mira al helicóptero, como un pájaro miraría sus propias alas estando dentro de una jaula. Se arrodilla en el suelo, las balas siguen dando contra el borde de la cornisa y algunas fugándose hacia el cielo oscuro. De nada le servirá, aprender sola a conducir una moto es una cosa, pero esto es imposible. “Vlad, Hoffman, Irina, están, están…” no se atreve a decirlo ni en sus pensamientos, pero sabe que es así, y los demás, ni siquiera quiere pensar en eso. Lleva su mano derecha a su cintura, toca la fría superficie del Big Ben que le dio Vlad como broma diciendo: “Cuando puedas disparar esto sin apretar las piernas, cariño, te habras ganado mi respeto”, la frase q antes la había enfurecido, ahora la entristece. Saca la pistola de su funda, en su pequeña mano parece enorme, los disparos a su espalda no cesan, de alguna manera los zombies saben que sigue ahí. Cierra sus ojos y lentamente eleva la pistola hasta colocarla sobre su sien. Los rostros de todos los que ha conocido desde que entro a la Zona comienzan a desfilar en su mente hasta que una niebla los cubre, desde la niebla oye un grito, una voz llamándola, rápidamente reconoce la voz, es Vanesa, su hermana. Nika también grita, le pide perdón por no haber podido encontrarla. Posa su dedo sobre el gatillo, aun escucha gritos: “corre!”. De repente una corriente de aire frio golpea su rostro y se da cuenta que los gritos no provienen de su mente. Gira su cabeza hacia atrás, hay alguien sobre otro techo haciéndole señas.
- ¡CORRE! – grita Alpana.
Nika mira al extraño, cuando repentinamente el edificio entero se estremece, la escalera por la que subió es arrancada hacia abajo y el hormigón suena desgarrándose hacia ella. Solo logra dar dos pasos hacia atrás, cuando la criatura salida del contenedor se para frente a ella. Solo están a menos de tres metros de distancia, Nika mira a los ojos de la bestia y confirma lo que le pereció ver cuando la vio salir del contenedor, esos ojos son humanos. Es una mirada penetrante que la observa con tristeza.
Konstantin oye gritar a alguien desde el techo del edificio en el cual se encuentra, cuando varios disparos surgen de la oscuridad hacia él.
Un sonido retumba en la noche y sobre el hombro izquierdo de la criatura aparece un hoyo del tamaño de un puño. La bestia lanza un golpe hacia Nika que lo esquiva por poco, Nika levanta la pistola y le dispara al pecho, la sangre vuela por el aire pero la criatura sigue en pie.
Desde el otro edificio Alpana vuelve a cargar su Barret y dispara, esta vez el impacto es en medio de la espalda de la criatura. El rostro de Nika se vuelve tan rojo como su cabello. El Big Ben suelta otro proyectil, que abre un considerable orificio en cuello de la criatura. Otro estruendo desde atras y la cabeza de la criatura estalla en el aire, el cuerpo se derrumba como un edificio a los pies de Nika, justo a tiempo para que esta vea en el cielo una silueta negra. Antes de que pueda gritar al extraño del otro edificio, desde el helicóptero en el aire se asoma un M72. Alpana ya había divisado al helicóptero pero prefirió acabar con la criatura antes de que atacara a Nika, mueve sus manos como en sus mejores tiempos, pero el gatillo del M72 se acciona antes que el del barrett y el techo donde se encuentra vuela en pedazos. Nika observa incrédula cuando el helicóptero gira hacia ella, otro M72 se asoma desde la compuerta y el paraguas rojo y blanco es lo último que ve antes de que el techo sobre el que se encuentra colapse totalmente.
Nubes de humo se elevan por toda la Zona.
El helicóptero se dirige a toda marcha hacia la frontera de la Zona de exclusión.
> Sector D limpio, recuperación de sujeto alfa fallida, sujeto alfa eliminado, equipo T1 eliminado. Equipo T2 fuera de perímetro y regresando a base, cambio y fuera <.
Desde la radio del helicóptero se oye otro mensaje.
> entendido equipo T2. Operación Biohazard en 10…9…8…7…6…5…4…3…2...<.
El soldado del M72 mira por la ventanilla en el momento en que una pequeña luz aparece sobre el cielo de Yantar, en milésimas de segundos el cielo se vuelve rojo. La onda expansiva crece por toda la zona y los corazones de miles de mutantes de todo tipo se detienen al mismo tiempo.