Otro más

al final termine instalandole el ofice 07 a la maquina de mi papá, ja como va a renegar esta noche!!! .

bueno como el relato es largo no digo mas nada.aca va, espero no defraudar.

advierto que es un poc mas fuerte que los demas. lean bajo su propio riesgo

Vlad’s Night

Siete siluetas se recortan en el horizonte infectado, una densa niebla oculta sus pisadas. El andar pesado los vuelve uno, pero este atardecer cada uno de ellos camina solo, con sus propios pensamientos. Esa misma tarde en el bar “Los 100 rads”, un stalker encapuchado les ha encargado una misión. Una suma más que tentadora, quizás demasiado tentadora, algunos en el grupo han planteados sus dudas, pero su líder Vlad les a cayado la boca aceptando rápidamente la misión.

- Si no quieren ir puedo hacer esto solo, no será la primera vez ni la ultima que acabe con todo un campamento, y si el dinero no les hace falta allá ustedes – dice mientras sale del bar observando la posición que le ha marcado el tipo en su PDA. El grupo de a poco sale detrás de él, algunos sin entender bien porque aún siguen aguantándolo.

- No se preocupen – dice Ezequiel – tenemos material como para cualquier misión – levantando su SPSA 14.

El extraño les da pocas horas para cumplir la misión, no mucho más de lo que les toma dar con el campamento, pero realmente ha sido muy fácil. Era un campamento de bandidos, de ahí debían recuperar algo, un maletín. Los pobres no supieron que los golpeos, algunos del grupo como Nika, Konstantin y Sykes no llegaron siquiera a disparar. Vlad había acabado con 5 bandidos en un par de ráfagas de su GP37 y los demás uno cada uno. El maletín no estaba a la vista y todos comenzaron a buscar.

- ¿Qué tal si la próxima dejas uno vivo para preguntarle donde está el maldito maletín? – azota Irina a Vlad, con un tono como diciendo “¿acaso eres estúpido”.

- ¿Qué tal si la próxima dejo uno vivo para ver cómo te vuela el culo? – contesta el sin siquiera mirarla.

Finalmente es la voz del Ruso Oleg quien alerta que ha encontrado el maletín. Rápidamente Vlad se mueve hacia él y le arrebata el maletín de las manos diciendo – si esto es más valioso que lo que ese idiota piensa pagarnos puede olvidarse de recuperarlo -.

Saca su cuchillo y con el mango golpea el débil cerrojo del maletín, el cual se abre dejando caer al fango un prisma brillante.

- Maldita sea! – suelta Hoffman en su idioma natal. Se agacha y toma el objeto en sus manos. Ahora en ruso – es un maldito lingote de oro! –

- quita tus manos alemán – bruscamente Vlad le saca el lingote de las manos. – ese idiota sí que puede olvidarse de esto! – mientras ríe como un loco.

- Esto es muy extraño, no me huele bien – dice Sykes. – ha sido muy fácil, y ¿quien dejaría eso en un viejo maletín? –

- ¿ha sido muy fácil, ingles?, ni siquiera has disparado tu puta arma. Quizás estabas muy entretenido mirando el culo de esa..

- tiene algo grabado – Dice Irina, mientras toma el brazo de Vlad que sostiene el lingote y limpia el barro de la superficie.

Vlad tensa el brazo y la mira a los ojos, para darle a entender que ni siquiera piense en intentar quitarle el lingote. Ella continua mirando la pieza y Vlad sigue su mirada.

- Ve…vendetta- dice Vlad.

- Venganza, no se mucho de italiano, pero significa venganza – interrumpe konstantin.

- En realidad es mi nombre – una voz gruesa suena a sus espaldas.

Vlad es el único que gira sobre la voz, como una cobra sobre un distraído que la ha pisado, pero tan rápido como él se mueve, un pequeño objeto de metal se hunde en el muslo de su pierna derecha. Aun así no es suficiente para evitar que los dientes del más cercano a él terminen en el suelo.

Los demás permanecen inmóviles, el grupo que ha aparecido va muy bien armado y el responsable de la bala en la pierna de Vlad es un tirador que está alejado varios metros frente a ellos. El tirador levanta la mano saludando – no se preocupe Jefe, los tengo cubiertos – sus manos se mueven como las de un mago al carga nuevamente su SVUmk2.

El tipo que hablo primero dice – suelten sus armas o el próximo disparo es a la cabeza de alguien –

Mira a Vlad que se apoya se apoya contra un tronco para no caer, aún tiene el lingote en su mano. – y tu gorila, mas te vale que me des eso – el tipo estira la mano esperando que se lo entregue, Vlad se agacha para tomar impulso y atacarlo pero en el momento en que suelta el golpe, otro objeto metálico atraviesa su carne, esta vez en el antebrazo derecho.

El lingote cae al suelo.

Vlad rápidamente toma con su mano izquierda la magnum de su cintura, pero en menos de un segundo tiene tres caños de SPSA 14 en su cabeza.

Uno de los tipos se agacha, toma el lingote y se lo entrega al líder del grupo.

- Maldito bandido!, voy a arrancarte la cabeza – la furia en los ojos de Vlad podría derrumbar a cualquiera, pero no a este tipo.

- ¿bandido?, que no te engañen nuestras vestimentas, gorila. Nosotros no somos de ninguna estúpida facción, nosotros somos la muerte. Pero no te preocupes, esta vez solo nos llevaremos esto – levanta en lingote frente a la cara de Vlad – y toda sus pertenencias claro está. -. Dirigiéndose a sus hombres y señalando a los del grupo de stalkers – tomen todas sus armas, sus mochilas, todo. Quiero sobretodo el SEVA de ese – señalando a Konstantin – tomen los demás trajes excepto el del freak – mirando a Hoffman. - No me interesan esas estupideces, también los de las mujeres, a alguien le entraran. -

Los del grupo se miran entre sí, pero no ofrecen ninguna resistencia. Konstantin intenta ocultar su desert ealge, pero una bala del tirador pasa a escasos centímetro de su cabeza, como advertencia. Inmediatamente uno de los tipos quita la pistola de su mano, sin que él se resista. Hoffman toma su guitarra.

- No te preocupes enmascarado, eso no nos interesa, y tampoco tu mascara fetichista – dice el jefe, ahora hablando con sus hombres – lleven las armas, medicamentos y cosas utiles a los demás, el resto quémenlo junto con las cosas de esos bandidos muertos.

Vlad aún continua mirando al jefe, como si en ese lugar estuviesen solo ellos dos y estuviera saboreando el aire antes de arrancarle las tripas. El jefe lo mira a los ojos.

- hey gorila, sigues con ganas de pelear, eh? Me gustaría tenerte en mi ejercito, pero solo por diversión, solo como perro de pelea, es eso lo que eres, no?. Un estúpido perro de pelea. – suelta una risa y todos sus hombres lo siguen.

Vlad empuja a los que lo rodean y se lanza sobre el tipo de la gabardina.

Como si fuera un fantasma el tipo abre su gabardina y un destello brillante surca el aire. Al síguete instante Vlad siente algo ardiente en su cuello. El tipo sostiene una espada en sus manos, un pequeño hilo rojo se dibuja sobre la piel de Vlad.

-como dije no quiero matar a nadie, no me gusta tener que faltar a mi palabra y no nos pagaron por eso -, pero si tantas ganas tienes de morir no te preocupes, las bestias no tardaran mucho en oler la sangre y me pregunto si tus manos serán suficientes para librarte de esa. Admito que me gustaría verlo, pero tengo otros negocios. – guarda su espada con la misma velocidad que la desenfundó. – Vámonos – dice a sus hombres.

El extraño grupo se aleja, las pocas pertenencia que no les robaron ya no son más que cenizas.

Vlad tiene la mirada clavada en el suelo tan fijamente que podría abrir un camino al infierno. Nadie en el grupo se atreve a hablar.

Irina mira a Nika que trata de abrazarse a sí misma por el frio. – Tomemos esos trajes – señalando a los bandidos muertos. Irina y Nika pasan delante de Vlad semidesnudas, pero él ni siquiera las registra. Los demás también toman trajes de bandidos, excepto Hoffman, ni a él ni a Vlad les han quitado las vestimentas, ya que Vlad lleva una simple chaqueta casi sin protección.

El fuego se extingue. Y de repente el grandote, gira bruscamente, y como si no hubiese pasado nada dice – vamos, muevan el culo – y comienza a caminar. A la pasada le suelta una mirada al ingles, y piensa “una, una sola palabra, dame el gusto y esa puta tendrá que juntar tu mierda de cerebro ingles del maldito fango”. Sykes desvía la mirada sin decir nada, Vlad continua caminando. Los demás se miran perplejos, Irina dice – vamos, aquí no hay nada útil. Cuando encuentre a ese maldito en el bar me va a conocer - . Todos marchan de a poco tras Vlad e Irina.

Irina se coloca a la par de Vlad, esta por decir algo pero él habla primero

- Hay un sitio en esa dirección – mientras señala – un refugio de bandidos, cuando lleguemos estará oscuro, son solo novatos, conseguiremos algunas armas y con suerte algo de vodka, voy a matar a alguien si no tomo algo –

Irina asiente con la cabeza – deberías dejar que Nika vea eso – señala la herida del brazo de Vlad.

Él ni siquiera contesta y sigue caminando. Los demás siguen detrás de ellos en silencio.

Llevan marchando dos horas, la ultima por un terreno fangoso. El sol termina de hundirse en el horizonte a sus espaldas.

Unas pequeñas ruinas aparecen frente a ellos, Vlad se detiene. Hoffman por poco choca con él, suelta un suspiro sordo dentro de su máscara, lo último que necesita es una pelea.

- es ahí – dice Vlad – yo voy primero, y más vale que ninguno sea tan idiota como para hacer ruido, sobre todo tu ingles –

Skyes lo mira dándole a entender que ya ha sido suficiente.

- ¿Qué diablos..?! – dice Vlad y antes de que comience algo que termine mal, Irina interrumpe.

- ¿Vamos por esos banditos o qué? – comienza a caminar hacia las ruinas. La oscuridad los cobija. Irina llega hasta una ventana rota desde la que se ve el brillo de las llamas de una fogata en el interior de la precaria construcción. Vlad se acerca a otra ventana. El resto del grupo se forma detrás de ellos. Sigilosamente todos se va acercando a la entrada, desde el interior no se oye nada. Irina llega a la entrada por un lado y Vlad por el otro, el resto del grupo está dividido a sus espaldas. Vlad mira a Irina y señala hacia el interior, luego muestra 3 dedos, dos, uno. Ambos saltan hacia el interior y descubre que no hay nadie.

-¿Qué?, ¿Dónde están los idiotas? – Vlad mira el interior de la construcción pero no es tan grande y no tiene muchas cosas como para que estén escondidos.

- se han ido – Ezequiel señala al suelo. Hay varias pisadas en la misma dirección.

Vlad se agacha toca el fango hundido por las botas de los bandidos - no hace mucho, podemos alcanzarlos –

- ya está muy oscuro, no podremos seguirles el paso rápido y no podemos andar en la oscuridad sin armas ni equipo, una anomalía, una jauría de pseudoperros, unos malditos con visión nocturna y estamos fritos. Yo no pienso seguir – dice Oleg mientras mira a los demás.

- tiene razón, debemos pasar la noche aquí, el fuego mantendrá a las bestia alejadas y si los bandidos regresan estaremos esperando – Ezequiel se sienta sobre los restos de una mesa.

Los demás asienten.

Vlad mira a todos a los ojos – está bien como las señoritas quieran, quieren estar sentados como unos estúpidos, estaremos sentados como unos estúpidos entonces – se sienta sobre un gabinete volcado en un rincón.

Todos toman asiento, Irina junto a Ezequiel en la mesa, Konstantin, seguido a ellos, sobre un neumático, observa su mano derecha como si se la hubiesen arrancado. Nika y Sykes en el suelo, Oleg está junto a ellos. Hoffman también se sienta en el suelo un poco mas retirado y deja su guitarra sobre un tambor.

Los minutos pasan, el silencio se apodera del lugar. Las manos de Hoffman comienzan a inquietarse, se levanta y toma su guitarra, Vlad lo mira y dice – no empieces con esa mierda de música marica otra vez -.

Sykes interrumpe – no sé de qué te quejas, estamos aquí gracias a ti, tu estúpida idea de aceptar esa misión y tu estúpida idea de venir a estas ruinas de mierda para nada –

Sykes no tiene tiempo siquiera de levantar la guardia, cuando su nariz estalla tras uno de los puños de Vlad, el puño del brazo herido. Inmediatamente las lágrimas nublan su vista. Lanza un golpe pero no da más que en al aire, y de repente el otro puño de Vlad golpea su mandíbula tirándolo al suelo.

- tenias que abrir tu puta boca, ¿verdad?, eso te ayudara a mantenerla cerrada.- Grita Vlad.

Oleg salta del suelo y toma Vlad por la espalda. - ¿estás loco, maldit…?!.-

El codo de Vlad se hunde en las costillas de Oleg, sin romperlas solo por suerte. Oleg se tuerce y recibe un puñetazo en el mentón tirándolo al suelo encima de Hoffman, partiendo la guitarra en dos. Ya todos están de pie. Nika grita como loca mientras se agacha junto a Sykes, Irina salta sobre Vlad pero él se la saca de encima empujándola, su espalda golpea contra un borde de metal, de lo que en un pasado fue un catre, y un latizado cruza su cuerpo paralizándolo momentáneamente. Ezequiel y Konstantin toman cada uno un brazo de Vlad, él sigue forcejeando, aun herido es muy fuerte. Nika se levanta y lanza un golpe con su puño a la cara de Vlad, que en ese momento se saca a los dos de encima, justo a tiempo para detener el golpe. NIka lanza un patada al cuerpo pero también es desviada, en el mismo impulso gira y lanza otra patada de reves a la cara, pero él la esquiva. Ahora ella suelta un puñetazo, Vlad toma su brazo y luego el otro, Konstantin y Ezequiel se incorporan para ir sobre Vlad nuevamente, pero en ese momento Nika en un rápido movimiento le da una patada en la pierna justo donde entró la bala, él la suelta y le da un golpe con el dorso de la mano, una nube de sangre se suspende en el aire mientras Nika cae hacia atrás. Hoffman, Ezequiel y Oleg sostienen a Vlad.

- basta maldita sea, ¿ te has vuelto loco?, no vamos a matarnos entre nosotros!.- grita Oleg.

- Dios, mira lo que estás haciendo! – dice konstantin señalando a Nika y Sykes tirados en el suelo ensangrentados.

Los ojos de Vlad que están en llamas, de un momento a otro, como una ráfaga de aire frio, vuelven a la normalidad.

-suéltenme! – dice sacudiéndose.

Ellos no aflojan la presión.

- suéltenlo - dice Irina, mientras se levanta tomándose la cintura. Los tres las miran y de a poco sueltan a Vlad.

Vlad mira a Sykes en el suelo. –tenias que hablar…-. Luego mira a Nika y no dice nada. Sin mirar a los demás sale de la habitación, se dirige hacia afuera y se sienta sobre el tronco de un árbol caído.
Todos lo ven salir sin decir nada. Nika se limpia la sangre de la boca y se agacha sobre Sykes, el aún tiene sus manos sobre la nariz.

- Déjame ver – dice Nika, Sykes corre las manos, ella toca su nariz y la mueve. Sykes salta del dolor. –Está rota – dice ella – pero al menos se detuvo la hemorragia. –

Ezequiel le pregunta a Irina – ¿estás bien? -. Ella responde – No ha sido nada.-

Irina mira a Nika. - es un maldito loco adicto a esa pastillas y ahora que no las tiene hace de eso una excusa, ¿estás bien Nika? .

- es menos doloroso de lo que se ve. Juraría que a último momento contuvo el golpe. – dice Nika

- ¿contenerse?!. Ni sabe lo que esa palabra significa.- escupe Irina.

Nika mira a Sykes. – vamos a tener que esperar a conseguir algo de material médico antes de poder hacer algo -.

- No hay problema, he pasado peores que esta, fui militar ¿recuerdas?-. Mira a Nika y sonríe.

- se que no es nada en comparación, pero…- Hoffman mira su guitarra unida solo por dos cuerdas – maldito loco -.

- mejor dejémoslo solo, si quiere irse nadie lo detendrá, si mañana está de nuevo en sus cabales podemos hablar, sino, hará su propio camino -. Konstantin vuelve a sentarse sobre el neumático – al menos nadie tenía un arma, ni termino en el fuego -.

Todos se acomodan en algún lugar. Vlad sigue afuera sentado, parece parte del tronco. Ahora el grupo vuelve a ser consciente del frio. El viento esconde la risa de alguna deidad de la zona, que disfruta con su miseria. El cansancio y el estrés de los últimos minutos logran de a poco someter a algunos a un sueño leve, nadie se permite estar del todo inconsciente en medio de la noche y desarmado, ni siquiera con Vlad afuera, o precisamente justo por eso. Nika es la única que mantiene los ojos totalmente abiertos. Sykes está a su lado, respira con dificultad pero parece estar dormido. Ella mira a Vlad, sigue en la misma posición, las ráfagas de aire parecen no afectarlo para nada. Pasa una de sus mansos sobre su boca, tiene el labio inferior hinchado y más ardiente que el fuego que los ilumina. Pero el dolor casi se ha desvanecido. Continúa mirando a Vlad como hipnotizada por varios minutos.

Vlad mira a la oscuridad como si estuviera frente a una vieja conocida y se deja perder en ella.

Mira hacia adentro, ahora todos duermen, se pone de pie y camina hacia la puerta. Piensa “malditos inútiles, solo son una carga, pero eso va terminar aquí”. Algo brilla a sus pies, es un trozo de chapa triangular. Se agacha y lo toma, está muy afilado. Continua mirando como todos duermen. “son débiles, la zona tarde o temprano los devorará, yo voy a ahorrarles la pérdida de tiempo”. Se acerca sigilosamente hasta Sykes. Con su mano izquierda presiona sobre su boca, el ingles abre los ojos con desesperación, pero antes de que entienda que está sucediendo la improvisada hoja envía chorros de sangre hacia la fogata, Vlad sostiene la presión en su rostro hasta que su cuerpo deja de convulsionar.

Vuelve a mirar a los demás como un niño en una juguetería. Elige al próximo, coloca el trozo de chapa triangular de modo que uno de los lados hace base en la palma de su mano. Se desplaza unos centímetros a su costado y como una catapulta lanza la estocada directo al corazón de Oleg. El único reflejo del ruso es el abrir de sus ojos y su boca, pero sin proferir ningún sonido. “tú puedes esperar puta” piensa mirando a Nika. “es tu turno niñato” repta hacia Konstantin. Coloca su nueva arma favorita a la altura de la boca de él, tomándola de la misma manera para evitar fallar. Desliza su mano izquierda hacia la entrepierna de su compañero indefenso. Como si una corriente eléctrica recorriera su cuerpo, cierra su puño fuertemente, algo estalla. Konstantin abre sus ojos y antes de poder gritar la chapa se clava en el fondo de su garganta llegando a la base de su cráneo.

Ahora se le antoja un alemán. “Nazi marica, a mi no me engañas”, se levanta, toma los restos de la guitarra sigilosamente, le quita todas las cuerdas. Las cuerdas de las guitarras en La Zona suelen ser muy resistentes pero no quiere arriesgarse a usar solo una. Da un par de vueltas con el manojo de cuerdas sobre sus manos. Hoffman está dormido, sentado con la cabeza hacia abajo por lo cual no necesita moverlo. Desliza suavemente las cuerdas alrededor de su cuello y tira violentamente. Hoffman lucha pero no puede pedir ayuda. Forcejea unos segundos, Vlad suelta las cuerdas y las deja caer, los ojos de Hoffman quieren salirse a través de los cristales, intenta gritar pero no sale ningún sonido de su garganta. Vlad lo mira con una sonrisa siniestra y antes de que el alemán pueda reaccionar su cuello se tuerce como un truco que ningún contorsionista podría realizar. Vlad aún sostiene su cabeza y lentamente baja su cuerpo hacia el suelo para no despertar a los demás. Camina hacia la mesa. Y se detiene mirando a Irina. Recorre todo su cuerpo con los ojos, luego mira a Ezequiel a su lado. Se agacha y toma un trozo de concreto con parte de la estructura de hierro interior. Levanta el precario martillo, y como si fuera una guadaña desciende con fuerza golpeando al argentino en el medio de la cara, matándolo en el acto. Irina se despierta sobresaltada por el ruido, y lo primero que ve es parte del cerebro de su nuevo amigo esparcido por la pared. Inmediatamente suelta un grito que rápidamente es ahogado por uno de los puños de Vlad. La sangre comienza a brotar de su nariz y su boca, su vista se nubla. Siente que algo duro y pequeño desciende por su garganta y alguno más en su boca, escupe y ve como salen volando varios de sus dientes. Vlad la toma del cuello, ella intenta luchar pero el dolor es muy intenso. Con la otra mano él le arranca la maltratada chaqueta de bandido. Ella suelta un débil golpe. De repente el mundo se vuelve un ensordecedor subido al golpear su nuca contra la pared bajo la presión de la mano de Vlad. Él comienza a quitarle el pantalón, “ahora vas a saber lo que es un verdadero animal”. Abre sus piernas y …

- ¿quieres que revise tus heridas? – llega la voz de Nika devolviendo su culo frio al árbol caído fuera de las ruinas.

Vlad despierta.

- ¿te molesta si me siento acá? – insiste Nika

Como si nada él contesta sin mirarla- hasta que alguien te meta una bala entre las cejas es un territorio libre, creo-.

- se que a último momento contuviste el golpe- Nika lo mira a los ojos.

- esos inútiles necesitan un medico en el grupo -. Responde el

- está bien voy a tomar eso como una disculpa -.

-pss- suelta él, sin poder evitar una sonrisa.

- al menos te he sacado un sonrisa – ella también sonríe

- es que me parece muy gracioso estar en el medio de la noche desarmado con cinco tipos que no pudieron con uno que lleva dos disparos – Mira Nika a los ojos, hace una pausa, desvía la mirada y por lo bajo dice – lo siento…no pude contenerlo del todo -.

Ella lo mira sorprendida. – No es nada – dice. - Pero tus heridas se ven mal, deja que las revise.-

- Has lo que quieras – contesta indiferente.

Nika revisa las heridas, Vlad esta inmutable como si solo fuesen rasguños.

-puedo sacar las balas, pero el problema es que no tenemos vendas –

Vlad toma una de las mangas de su chaqueta y la arranca y se la alcanza a Nika

Nika toma la manga, la separa en dos con un trozo de chapa filosa que recoge del suelo a los pies de Vlad, y comienza a cubrir las heridas. – de todas formas el peligro mayor es que se infecte, y esto no sevira de mucho, mañana deberíamos cambiarlas por vendas reales -.

Nika de repente se queda en silencio mirando la oscuridad. Vlad mira su rostro y luego trata de seguir lo que está mirando ella.

-¿has visto algo? – dice él.

Y Nika como si despertara de un sueño dice – ¿eh?, no, no he visto nada. Solo que me he dado cuenta de algo…

- ¿Qué?- pregunta él.

Nika hace una pausa. –he estado ocultándolo de ustedes, pero mañana necesitare algo que no tengo -. Y antes de que pueda seguir hablando.

- ¿Tu insulina? –

Nika lo mira sorprendida. - ¿Cómo…?

- Ese maldito perro viejo de Sidorovich me ha sorprendido pidiéndome el favor de que te proteja, me ha contado que necesitas inyectarte a diario, dijo que te debía un favor, y la verdad pequeña que no he querido preguntarle que.- Vlad la mira a los ojos. – No te preocupes hermosura, mañana tendrás tu dosis…aunque tenga que sacársela al más hijo de puta de los chupasangre de sus entrañas, con mis propias manos.- hace una pausa y agrega. – Así ese viejo me deberá un favor a mí -.

- grac..- intenta decir ella pero Vlad la interrumpe.

- mejor entra con los demás, yo necesito estar un tiempo más aquí. Tengo que terminar de pensar en algo.-

Los ojos de Vlad han recuperado su brillo normal. Nika sin decir nada lo mira y luego vuelve al interior de la construcción.

_ ¿Dónde habíamos quedado mí querida rubia? – se oye por lo bajo.


Code Veronika.


sisi, se que use el viejo truco de "al final era todo un sueño" pero espero que haya funcionado

No me gustó el hecho de que apareció el tipo llamado "Vendetta", vistiendo una gabardina de bandido, y con una espada oculta dentro, y que su grupo no sea una facción, sino que sea "la muerte"... tiene reminicencias del Shinigami, pero no puede ser él, esto no puede transcurrir en 2013, porque sabemos cuál es el final de Konstantin & Nika's Epilogue, y eso es anterior a la llegada del Shinigami. Estos "bandidos" que asaltaron al grupo va a generar mucho odio de parte de todos hacia la figura del Shinigami.

Este relato debe ser posterior a Ezequiel's Night, porque se rompe la amada guitarra de Hoffman.

Y comienza un leve indicio de la relación lésbica Irina-Nika, creo.

No todo gira alrededor de Shinigami Saigo, quizás a vos se te antoja el parecido porque sos el creador. Lo de "La muerte" quizás no es más que el nombre del grupo. Puede que sea un grupo, si no es de bandidos (dado que dicen no serlo), de mercenarios disfrazados de bandidos que se dedican a eso (dado que dicen que lo que estan haciendo es un trabajo "...no nos pagaron por eso..."). De todos modos tampoco es que "la muerte" sea exclusividad de Shinigami. Luego lo de la gabardina, que si no hubiese usado el térmno "gabardina" ni siquiera contaba, es de bandidos osea que al menos uno de cada tres bandidos lleva una de esas. Quizás el único punto "real" en común es la espada, pero Vero ya venía "jodiendo" con el tema de la katana desde mucho antes. Otra cosa es que no sé por que pero no me lo imagino a Shinigami con voz gruesa ("- En realidad es mi nombre – una voz gruesa suena a sus espaldas." ) aunque esto último son cosas mías y no se si lo habras mencionado en algún relato tuyo. También está el tema de la teatralidad, osea Shinigami es más "lady gaga" (en el buen sentido) y este tipo no, ya que al verlo a Hoffman se burla de su apariencia.
O quizás justo Vero había visto la peli "V for Vendetta" y quizo usar algo de eso...o pude que te haya hecho una broma, no recuerdo los comentarios de ese entonces o si vos ya habías escrito varias cosas de Shinigami para cuando ella escribió esto. En fin, el parecido me parece más antojadizo que real, si vamos al caso el propio Shinigami tiene reminiscencias de varios personajes.

Ya sé, Jota. Es que en esa época Vero y yo comenzábamos a hablar sobre buscar una relación temporal de los textos, porque yo todo el tiempo escribía sobre Nika y Hela, y esto y lo otro, y yo estaba comenzando a aprender de la historia de los personajes de las partidas de rol, y buscábamos conectar todo, pero no estábamos seguros de la diferencia temporal que tenían. (además a Vero no le gustaba mucho como yo "mejoraba" la Zona, mientras ella la "empeoraba", pero ahora estoy un poco más realista al escribir textos, tengo muchos que arreglar todavía).

Es cierto, de hecho no me acuerdo el nombre pero hay un relato en donde "desmiente" lo dicho por Shinigami de que la Zona comenzaba a mejorar. La verdad que eso de las flores y demás no sonaba muy bien ... se me ocurre algo

ese relato, son 3, son Preludio de una verdad ineludible 1 y 2, y Cenizas

Jota, no vayas a hacer cagada ahora >_> no me gustó ese emoticón del final

ah, y mejoré "Flanquear", ahora se agarran a las piñas con el Shinigami al principio, hay un de diálogos extra y algunas correcciones menores

ya me imagino que Shinigami les da una paliza a los dos XD, ahora lo leo...ah y la "cagada" ya está hecha ahora la subo

PD: este grupo me gustó para usarlo en algun otro relato, me refiero a estos tipos liderados por el tal "vendetta". Voy a releer otros para ver si aparecen de nuevo.